Sustos y pánico en discos

De las cosas más desagradables para cualquier disquero preocupado por sus discos, los sustos y huidas de pánico tienen su causas y generalmente se pueden evitar y/o corregir.

La huida desesperada

El disco no es un gran nadador. No es particularmente activo ni suele recorrer grandes distancias. Tampoco es un depredador que persiga a sus presas. Más bien espera a lo que traiga la corriente. La forma de su cuerpo le permite dominar la corriente y moverse bien entre raices verticales. Eso si, no deja de ser un pez de tamaño medio que si es necesario pone en marcha toda su masa muscular. ¿Cómo lo hace? Con un fuerte latigazo de todo su cuerpo. El chasquido que produce a menudo se escucha incluso fuera del acuario. Ese movimiento le propulsa lejos de su posición normalmente hacia aguas abiertas. Por ejemplo cuando es atacado por un enemigo.

Consecuencias en el acuario

En el acuario no hay aguas abiertas. Hay barreras invisibles en ese momento de pánico. Relatos cuentan que al golpearse con el vidrio del acuario a veces los discos sucumben al golpe en la cabeza. Otras veces, al no poder continuar recto, continuan la huida hacia arriba saltando fuera del acuario si no está tapado o golpeándose contra la tapa. Otras veces se dirigen hacia abajo revolviéndose en la arena y levantando una buena «polvareda». Además si rozan objetos afilados en el acuario se hacen heridas y cortes de diversa gravedad.

Por cierto, la última vez que me saltó un disco del acuario, fue con la iluminación apagada, con unos Ramirezi con puesta, a la que seguramente se acercó demasiado el disco. Lo ahuyentaron y del susto saltó. Importante no olvidar la tapa abierta…

La consecuencia pueden ser heridas que se infecten y/o peor, estrés, que les causa esta tensión a veces permanente. El estrés continuado no les permite desarrollarse normalmente, comer, socializar. Y ya sabemos que el estrés es el comienzo de otros problemas de salud como afecciones parasitarias principalmente. Un susto puntual no tiene mayor trascendencia, pero a veces los discos entran en una dimámica de la que puede ser difícil sacarles.

Es interesante que el disco nos muestra con su actitud su grado de confianza y bienestar. Cuando se siente inseguro y nuestra cercanía le incomoda, se inclina hacia nosotros, mostrando su aleda dorsal. En esa parte muchos discos tienen las lineas azules onduladas que les camuflan vistos desde arriba con la entrada de luz solar. Se quedan quietos y alerta para soltar ese latigazo que los haga desaparecer del lugar. Si seguimos invadiendo su zona de seguridad efectivamente saldrán disparados. Pueden contagiar a los demás con su huida despavorida y crear una verdadera histeria colectiva.

Causas de pánico y sustos en discos

Existen diversas causas posibles para este problema:

• Parámetros incorrectos: Los discos «nos avisan» de que algo no está bien con el agua. Según mi experiencia un aumento de nitrito desencadena estas reacciones.
• Golpes y vibraciones: una tema sensible que suele no gustar a los discos. Posiblemente en la naturaleza cuando cae un arbol o una rama grande al agua, es un factor de riesgo para el disco.
• Sombras sobre el acuario: Los enemigos naturales del disco vienen del aire, como aves rapaces o del agua como grandes peces. Por tanto las sombras repentinas pueden gatillar reacciones de este tipo.
• Iluminación: Según mi experiencia, en ocasiones si el acuario está más iluminado que el exterior y el disco no puede ver bien lo que se mueve fuera, siente miedo. He leido incluso de un caso donde reaccionaban mal por la camiseta blanca de su dueño en un cuarto oscuro. Pero tampoco les gustan las grandes prendas negras en movimientos repentinos cerca del acuario. A veces la propia desconexión de la iluminación puede provocar sustos.
• Hambre: Cuando tienen hambre y por fin llega la comida, su voracidad puede hacer que se asusten. A veces tanto, que ya no salen a comer.
• Alimento y otros: he leido en foros donde sospechan que incluso la comida congelada de baja calidad o algunos elementos decorativos, incluso raíces de maderas inadecuadas, pueden ser causa de estas reacciones en los discos.
• Soledad prolongada del acuario durante el día y susto al entrar una persona. En particular cuando la entrada a la habitación está muy próxima al acuario.

Qué hacer y como conseguir mejoría

en el pánico y los sustos de los discos. Si podemos descartar una causa directa como un golpe o una sombre grande, que debemos evitar, lo siguiente sería verificar los parámetros del agua, comenzando por nitrito, pero amonio y amoniaco también. ¿Ha terminado de ciclar bien el acuario? Dioxido de carbono alto puede ser otra causa. En estos casos miremos la respiración. Más de 80 bocanadas de agua por minuto es sospechoso. Hacer cambios de agua grandes con temperatura similar en este caso. Diariamente, hasta que los valores se normalicen.

Lo siguiente sería pensar qué otras cosas han cambiado, considerando también si los peces son nuevos en el acuario. Algo de la decoración y sobre todo la iluminación dentro y fuera del acuario. Es importante que los discos nos vean bien en la habitación. Eso no significa que no podamos apagar la luz, pero en tal caso la iluminación del acuario debería mantenernos visibles para los peces. De otro modo si nos movemos de repente, podrían asustarse si se olvidaron de que estamos ahí. También se han hecho buenas experiencias con la «luz de luna», una pequeña luz que queda iluminada durante la noche. O con las luces Led que tienen un encendido y apagado progresivo. Cusiosamente los tubos fluorescentes antiguos por ejemplo en la cocina, aunque esté todo apagado no les asustan. Tal vez porque recuerda a las frecuentes tormentas eléctricas de la Amazonia. Este efecto lo tiene a menudo la iluminación led.

Si hacemos las cosas bien los discos se acostumbran a nosotros

A veces, si están solos todo el día y se asustan cuando llegamos, dicen que dejar puesta la radio durante el día puede ayudar. Tendremos que ir descartando causas y probando cosas con clama, sin asustarles más todavía, como cambiar toda la decoración de golpe. Pero de algún modo los peces deberían poder acostumbrarse a nuestras costumbres siempre que no impliquen alguna de las posibles causas descritas. Hay que tener paciencia y ganarse su confianza de nuevo. Aunque a veces parezca misión imposible, si tenemos suerte podremos eliminar la causa raíz del problema. En el peor caso, el acuario necesita un nuevo emplazamiento. A veces también aumentar la población puede ayudar, pero cuidado porque estos comportamientos a veces se «copian» de unos a otros.

Pero a los animales en general se les puede «domar» con su comida preferida. Si les acostumbramos a que después de los cambios de agua estresantes, tienen su recompensa, posiblemente le pierdan el miedo con el tiempo. Es posible eliminar completamente las reacciones de sustos y pánico en los discos.

Ejemplo de sustos y reacciones de pánico

Si quieres leer sobre filtración del acuario de discos, pincha aquí.

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